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Lo dejo en tus manos

No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.

(Isaías  41:10)

Cada vez que nos vemos enfrentados a alguna dificultad en nuestras vidas, tendemos a buscar algún culpable o a simplemente el cuestionarnos por qué debemos afrontar esto, a veces sintiéndonos solos y no encontrando salida alguna, pero debemos acordarnos de que tenemos un Padre celestial, el cual siempre estará ahí para nosotros.

Generalmente, nuestra forma de ser nos lleva a cuestionarnos la mayoría de las cosas que hay en nuestro entorno, por lo mismo siempre buscamos alguna respuesta lógica a lo que nos sucede en el día a día, pero hay veces en las que no logramos encontrar dicha respuesta y es ahí donde empezamos a preguntarnos porque a nosotros, sin lograr comprender que en esa situación Dios tiene algo preparado para nosotros.

Mi mamá una vez me dijo que Dios nunca nos pone una prueba que él sabe que nosotros no podemos superar, y que nunca nos quiere ver mal, si no que cuando me vea agobiada por algo yo solo debía confiar en él porque nunca me abandonara, y en estos momentos en los cuales estamos viviendo siento que esa frase me ha ayudado más que nunca, nuestra confianza siempre debe estar en Nuestro Dios, ya que es él quien tiene el poder absoluto de nuestras vidas y sus propósitos siempre serán los mejores para nosotros, aunque a veces no los comprendamos, simplemente debemos confiar y descansar en él, ya que cuando comprendemos que Dios está siempre con nosotros, no importa las dificultades que se presenten, siempre saldremos victoriosos.

 

Dámaris Aranda